Gastronomía

Solo diré que la llaman la gorda (además de la docta y la rossa). Será por algo.

Lo típico como siempre en el país trasalpino, pasta y pizza. La pasta se puede condimentar con la salsa propia de la región, salsa a la bolognesa, que todos estamos hartos de probarla, pero verás que si la pruebas en su lugar de origen, es mucho más orgásmica. La más tradicional de Bolonia es la tagliatelle, sobre todo al ragú.

Hay un pan que se llama Crescentine e Tigelle, que son como bollitos de pan rellenos de queso, jamón crudo o vegetales fríos, que se ve que cuando los comes ves angelitos tocando el violín.

Después más comidas típicas italianas, como la lasaña, todo tipo de embutidos en especial la mortadela o incluso el café (que es diferente a España) o los helados.

Restaurantes recomendados (los he sacado de otra página, porque yo no tengo ni idea, aunque a alguno fui):

Osteria dell'Orsa (Via Mentana, 1): Este es un restaurante imprescindible donde comer en Bolonia. Además de ser barato, la calidad de los platos típicos boloñeses es excelente. Suele haber mucha cola en la entrada, aunque, por otro lado, eso demuestra que vale la pena. Ideal para una tagliatela al ragu (unos 6 euros). Está bastante por encima de Piazza maggiore, pero por el centro, un paseíto corto en realidad.

Vagh in Ufezzi (Via De' Coltelli 9/2): Este es un sitio ideal si quieres probar los platos típicos de Bolonia en un ambiente acogedor y familiar. El menú es limitado, pero es porque cocinan solo con productos frescos de temporada. Lo que no falta nunca son las crescentine, un producto típico parecido al gnocco fritto.

Osteria Le Sette Chiese (Via Borgonuovo 6/B): Este es un lugar donde comer en Bolonia bien y barato. Las porciones de los mejores platos de la comida boloñesa son abundantes y deliciosas. El ambiente es ameno y el personal muy servicial.

Mercato di Mezzo (Via Clavature, 12): Si te encuentras en el centro de la ciudad y quieres picar algo típico, sin perder mucho tiempo, te aconsejamos pasar por el Mercato di Mezzo. Es un espacio cerrado con decenas de puestos donde se puede comprar y consumir diferentes exquisiteces de Bolonia. Si puedes, evita las horas punta, ya que suele haber bastante gente.

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